Notable y hermosa película de Terrones Gilliam sin duda alguna.

Y ahora sí, vuelvo a reivindicar a Mr. Babuchas Puentes que aquí vuelve a dar otro mordisco en la tráquea.

Flotando sobre camperas, con camisas inverosímiles y cola de caballo impone su ley a base de estallidos de carisma, aún recuerdo su apoteósico recital en Secuestrada.


Roberto Williams mas histriónico que nunca (aunque aquí justificadamente) no atosiga en exceso, de hecho una de las mejores secuencias la protagoniza él con unas rimas dignas del mismísmo Chivi.

La película se alarga en exceso y para mi gusto sobran por lo menos 20 minutos y un "que la chupen" de fondo casi casi se llega a escuchar, pero bien.


Se despide desde vuestra redacción favorita.

Charo López desatascando al madelman amputado mientras un mono araña sobrevuela la redacción atado a un ventilador del falso techo