El argumento no puede ser más decepcionante. Las argucias de una maruja beata de sacristía para adquirir notoriedad después de haber sido ninguneada por no salir elegida como coordinadora de su cofradía, simplemente aburren y no interesan a nadie, salvo a los cofrades que puedan verse reflejados. La protagonista es, simplemente, una persona hipócrita, muy creyente por una parte, pero profundamente soberbia al no tolerar que se haya escogido a otro para el cargo. Insoportable comedia sin absolutamente nada que destacar. Para salir huyendo.