No sé que bebería Franka Potente para dormirse a 6 minutos de llegar el metro, y no sé qué clase de gentuza ve a una chavala dormida en una estación de metro a punto de cerrar y no la despierta, pero el principio ya se presenta prometedor. La chica ni oye llegar el metro, ni lo oye irse, y tampoco oye cómo cierran todas las puertas de la parada de metro en la que se encuentra.

Un asesino con malformaciones que se mueve como un ninja en la oscuridad, un compañero de trabajo cocainómano que se las ingenia para cojer el mismo metro que ella, a pesar de que las estaciones están cerradas ¿cómo demonios ha entrado en el vagón?
El yonki se queda entre dos vagones de la mima manera que George decide ponerse a descansar de espaldas a una ventana tras la cual sabe que ha oído al asesino, un asesino que mientras ellos huían se ha puesto todo un pequeño equipo quirúrgico y ha asesinado a la buena de Mandy realizando el mismo ritual que se realizaría antes de una operación. El puñetero Craig debe teletransportarse porque justo acaba de matarla y ya está detrás de George, al otro lado de la ventana, cómo si ellos no hubiesen dado más que unos pasos lentamente mientras escapaban. ¿Pero qué pinta ahí Craig? ¿Quién le construyó las jaulas? ¿Qué pinta el subterráneo de un supuesto hospital comunicado con el metro? ¿De qué ha vivido Craig desde la muerte del doctor? ¿Por qué Craig tiene una copia de todas y cada una de las llaves que abren las cerraduras de la alcantarilla y el metro? ¿Por qué diablos Kate (Franka) y George le perdonan la vida a Craig hasta en dos ocasiones? Y por el amor de Dios, que alguien me diga cómo lo hace Craig para sobrevivir a todo lo que le pasa en tan buena forma.

No se sustenta la historia de ninguna manera, ni siquiera está cojida por los pelos, y la verdad es que de Franka Potente, después de "Corre, Lola, corre" (película exquisita de 1998 que ella misma protagoniza), me esperaba muchísimo más.