Tres años después de la magnífica primera parte de "Rambo", Sylvester Stallone volvió a reencarnar al mítico John Rambo, una segunda entrega que sigue la historia de la primera con el coronel Trautman de por medio y siendo esta vez una película más de guerra y de acción que la primera, siendo un escenario perfecto para ver a Rambo en su plenitud. Una segunda parte que se sitúa tras los acontecimientos de la primera, donde el coronel Trautman le encarga una misión y así poder lograr su salida de la cárcel, una misión que se endurecerá cada vez más, con un Stallone que de nuevo vuelve a ofrecer una actuación sublime, con enormes escenas de acción, ya sean con armas o sin ellas, realizadas con calidad, tensas y con una banda sonora brillante que te hace despegarte del sofá varias veces, notándose que ya estamos en una película totalmente de acción/bélica a la par que realista en muchos momentos de la misma, con una historia que engancha cada vez más, con un Rambo humano, que sangra como todos, pero se las ingenia como ninguno, con un tramo final impresionante como por ejemplo la escena del helicóptero y el diálogo final de Rambo que ya es historia del cine.
Elaborando en definitiva una segunda parte que incluso supera a la primera, rozando el 10 si no fuera por algunas escenas de acción un poco exageradas, realizando una película de acción feroz, poderosa, grandiosa, escenificando al Rambo que queremos ver en combate, con una historia cada vez más intensa y un guion a la altura, con su energía, con sus enormes actuaciones también de los secundarios, que puso a Rambo (Sylvester Stallone) en el pedestal del género de acción y por el que considero esta segunda entrega, una joya del cine de acción. Nota más justa: 9,5/10.