Por establecer de entrada cierta sintonía temática para desconocidos de la serie, lo más parecido en tiempo y particularmente en espíritu es esa cosa medio aventura orgiástica de monstruos, medio tontería fallida, que se vino a llamar 'La liga de los hombres extraordinarios', recuerdo que sobrevuela rápido e inmediato por la cabeza en cuanto uno empieza a disfrutar los primeros capítulos. Pero 'Penny Dreadful' no se quedó en el intento. Menos aún, fallido. Según iba avanzando, esta serie, no demasiado larga, tomaba distancia por carácter y seriedad con esa relativa semejanza. Solo relativa. Juntando a una buena colección de personajes reconocidísimos en forma de galería de monstruos de la literatura fantástica, se ha sabido servir del influjo del miedo que estos poseen y bañarlo de un aura pseudo romántica, para infundirlo sobre otros personajes nuevos, inventados para la ocasión, que hagan de nexo de los ya conocidos. Algo así, como reinventar las diversas ficciones fantásticas que nos dejaron Stoker, Shelley, Wilde o Stevenson, unificarlas y supeditarlas bajo una nueva. Brujas y hombres lobo, el inmortal Dorian Gray, el gran Drácula, Victor Frankenstein y su criatura o Henry Jekyll y su alter ego Hyde, entre otros, tienen cabida y aportación, aunque es erróneo pensar que su condición los sitúe a todos del mismo lado.

Tintes góticos en la Inglaterra victoriana: bajo este prisma cultural y social se centra un relato que acierta a conjugar el misterio, el terror o el misticismo. Un desarrollo en el tiempo que no escapa del de aquellos personajes literarios que representa. En la vanguardia de los creados para la ocasión, Sir Malcolm Murray (Timothy Dalton), el intrépido y experimentado aventurero e Ethan Chandler (Josh Hartnett), un pistolero venido de América con un oscuro secreto cuyo desvelo juega una parte importante. Y me reservo con intención la mejor baza para el final; si bien es cierto que hay otros personajes que se alinean en el camino luchando por la misma causa, podríamos considerar que a los dos mencionados se les une un tercero de manera esencial en la lucha por combatir a aquellos que prometen un mundo de tinieblas. Me estoy refiriendo a la torturada figura de Vanessa Ives, vidente con poderes sobrenaturales y protegida de Sir Malcolm, siendo antigua íntima amiga de los hijos de éste. Enigmática, poderosa y bella y erigida, después de todo, verdadera piedra angular de principio a fin. Encarnada por una impagable Eva Green, ella sola sostiene el peso y es motivo suficiente para entender por qué debes ver 'Penny Dreadful'.
Entre los muchos claros que deja 'Penny Dreadful', existe algún que otro oscuro como el de dejar sin cohesión final a tanto nombre propio, abandonando a la deriva la aportación de alguno de ellos sobre la historia principal, algo que se revela insuficiente para hacerle daño a una serie espléndidamente cuidada en lo estético y con enorme fuerza expresiva en su interior. Sin llegar a hacerse del todo imprescindible (personalmente, no la encuadraría en la más alta burguesía de las series televisivas), no se podrá negar en ningún momento su disposición de ser única. Elementos más que notables para respaldar su visionado, tiene.