Gladiator fue estrenada en una oportuna época, en las que este tipo de películas no eran muy usuales, tras el éxito de ésta, la cosa cambió y volvimos a ver nuevas películas del peplum, aunque ninguna alcanza el nivel de la cinta de Scott.

Lo bueno del film, es que está a un gran nivel en todos sus aspectos, localizaciones, vestuario y efectos visuales perfectos que recrean con todo lujo de detalles, ejemplos de ello, los encontramos en Roma, sus edificios, su coliseo, la maravillosa muestra de la sociedad romana y las batallas que inician Gladiator.

Otro punto los actores: Russell Crowe tiene un papel que le encaja como un guante, Joaquin Phoenix, estupendo como el amoral Comodo sin duda fue una interpretación que me encantó y me hizo seguir a este actor, en esta película lográ que realmente le odies, Connie Nielsen tiene un importante peso, que sabe sobrellevar de forma excelente siendo la única protagonista femenina del film. Richard Harris corta pero notable aportación, con unos estupendos diálogos entre su personaje el emperador Marco Aurelio y el personaje principal Máximo (Crowe).

Más puntos a favor, la magnífica banda sonora que logra envolver al film y que consigue emocionarte cada vez que la escuchas y que le sienta estupendamente a todas las escenas de la película. Espectacularidad en las escenas de acción (muy violentas eso sí, no es una película para los más pequeños, por su temática y el contenido violento que tiene) están muy bien rodadas y me quedo con las que suceden en el coliseo. La trama que no voy a extenderme es también bastante notable y muy bien contada pese a que se diga que es muy fantasiosa o irreal, dado que un gladiador desafía al emperador de Roma, pero es una película que contiene pasajes brillantes y cuyos personajes están muy bien descritos.

Una de mis películas favoritas que nunca me canso de ver, ya que aunque es larga no te aburre y sabe enganchate hasta el final.