Para un fan como yo de la ciencia ficción , más de la escrita (que hay mucha y muy buena) que de la filmada (que hay poca y bastante mediocre), es triste ver lo que están haciendo con este género.

EL JUEGO DE ENDER, es una de esas novelas "de culto" de dicho género, ganadora de los más prestigiosos premios del sector ( Hugo y Nébula), que dió origen a una saga. Libro que leí en su día, que me aburrió hasta el límite y del que no recuerdo absolutamente nada (imaginaos lo que me marcó).

Después te enteras que su autor, de cuyo nombre no quiero acordarme, dijo que se había inspirado el la saga "Fundación" de ISAAC ASIMOV (este nombre siempre en mayúsculas) y casi me da la risa. Por no hablar, que no lo voy a hacer, de su deleznable ideología.

Siempre he dicho y mantengo, que ciencia ficción de la de verdad, de la de los grandes maestros, hay muy poca en cine. Y casi siempre acaban convirtiendo las supuestas adaptaciones, en meras simplificaciones e incluso prostituciones deleznables de su original.

Si a esta visión cegata de la industria, le sumamos los prejuicios de la academia hacia este género, la de intelectualoides y cinéfilos de esos de "pro"...vamos jodidos.

Pues esta película que nos ocupa, hace muy poco , o nada, por cambiar esta visión del género.

No me voy a extender en un análisis profundo de algo que no tiene ninguna profundidad.

De hecho, más que una película, la definiría como un gigantesco trailer, una promo descomunal de un videojuego.

No hay intencionalidad de hacer buen cine (ni malo).
Todo es light: interpretaciones light, dilemas morales light, crítica social e institucional light, diseño light, ritmo light, acción light, guión light, final light...

Todo es plano, sin sorpresas, sin emoción, cobarde, sin alma, sin vida propia.

Todo es prestado o robado y está visto ya.
Su protagonista, Asa Butterfield, es incapaz de transmitir. Harrison Ford ni siquiera adorna. Ben kingsley, casi da risa, sólo Abigail Breslin (la gran "pequeña miss sunshine") mantiene el tipo.

Su "director" detenta el dudoso record de haber conseguido una interpretación absolutamente plana de la grandísima Viola Davis. Al menos por eso pasará a la historia.

A pesar de todo ello, la cosa entretiene (más o menos) y si lo acompañas de una buena bolsa de palomitas, puedes pasar dos horas de evasión sin más.

Yo me entretuve, a pesar de todo, aunque tuve la misma sensación de timo consentido que cuando voy a un burguer y pido un menu "big mac-whooper doble con patatas de superluxe y bebida extra grande", que le quitas los envoltorios y se quedan en un bonsai de hamburgesa hipercalórica y lo que te llena es la bebida gaseosa.

Por lo demás, supongo que habrá segunda y tercera parte. Supongo que venderá muchos videojuegos. Supongo que los adolescentes acudirán en masa a leer las novelas de ese señor que no quiero nombrar. Y supongo que tendremos que seguir escuchando que esto es ciencia ficción.
Lo dicho, vamos jodidos.