Puedo asegurar que nunca me enganché a una serie hasta ver Perdidos. Es alucinante. Fui capaz de tragarme 6 capítulos (de 40min cada uno) seguidos y no hubiera parado, pero debía irme a dormir. Es una especie de droga. Engancha de una manera increible. Creo que el secreto de esta serie es que hay miles de porqués por desvelar, crees que se resuelven, pero caes otra vez. Pero no hay nada forzado. Las situaciones se suceden sin sentir que te esconden cosas, sino que te desvelan. No te sientes timado. Cuánto más avanza la serie más preguntas tienes, pero sientes que avanzas. Los personajes tienen muchísimo juego, no se sirven de clichés y cuando crees que los conoces sus reacciones te desencajan de nuevo. Lo de los flashbacks es muy buena idea, y sobre todo el hecho de que vayan del presente al pasado de forma progresiva: pasado-cercano, pasado-menos cercanos, etc. Y lo mejor de todo es que no creo que haya personajes que sobren, algo que suele pasar en muchas series, el típico personaje de relleno, son insoportables.