Pesada e impactante película a nivel emocional. Narra la historia de una madre que pierde la vista progresivamente y hace todo lo posible por recaudar el dinero necesario para que su hijo pueda ser operado en sus ojos y no sufra la misma suerte que ella debe enfrentar, sin embargo, las cosas no salen como ella lo espera. De por sí, el tema ya es bastante fuerte, sin embargo, Von Trier logra elevar el drama a unos niveles casi que insoportables. No por nada se le critica por hacer de esta película un caldo de la tragedia humana a un nivel muy exagerado para el gusto de algunos.

Quisiera ser positivo y creer que la historia contada es ficción, que sólo procede de la imaginación de un tipo al que le pagan por entretener y que, en la realidad, nunca sucederán cosas como las que se presentan en la cinta. Pero sabemos que no es cierto, que el mundo está plagado de historias que no tienen finales felices y que el dolor y el sufrimiento campean a sus anchas en un mundo donde las personas estamos adoctrinadas para valorar los cuerpos bellos y las caras felices como algo normal, despreciando todo lo que pueda ser diferente a los modelos que se nos han impuesto. Extremadamente recomendable. Advertencia: No apta para personas emocionalmente frágiles o depresivas.