Varios años después del éxito de Terminator, ve la luz esta película en la que uno de los héroes de acción más populares de los ochenta se enfrenta a un enemigo un tanto singular. Un extraterrestre que comete sus crímenes aprovechando su habilidad de hacerse invisible, pero que también ve y escucha como si fuera un robot. Son muchas las escenas en las que se nos sitúa en la perspectiva del alienígena, especialmente cuando acecha, rastrea o persigue a sus víctimas. Que por cierto, especialmente destacable el diseño y vestuario del monstruo, que oculta su terrible faz bajo una máscara.

La película entretiene y ofrece el adecuado suspense adornado además de una muy efectiva banda sonora. Sin embargo, su desarrollo se haya plagado de los típicos clichés de estas cintas de thriller de ciencia ficción. Así, el final me pareció demasiado convencional. Comparándola con Alien o Terminator está claro que queda bastante por debajo, pero el ambiente de la jungla es acertado y Schwarzenegger cumple con lo mínimamente esperado. No es su mejor película, pero si es lo suficientemente interesante como para engancharnos. El resto de secuelas trataron de exprimir el gran éxito comercial de esta obra.