Enrique Gato vuelve con un nuevo título de animación que ha supuesto un éxito, pero creo que se encuentra por debajo de la estupenda aventura de Tadeo Jones. Aunque la califique con la misma nota. Digamos que la de 2012 tendría un 7,6 y ésta tendría un 7,0.

El presente juega con el rumor de si realmente los americanos llegaron a pisar la luna (allá cada cual que piense lo que considere) y construye una historia que divide a los que sueñan con conseguir cosas que su familia no ha podido con los que sólo quieren el reconocimiento personal aunque haya que falsear la historia para ello.

El trío de protagonistas es básicamente el estereotipado habitual. El chico que evoluciona de ser cobarde a más valiente, la chica que mantiene una relación complicada y el graciosete que le busca su punto a todo. Por otro lado, el consabido malo malísimo, más malo que el turrón de bacalao y megalómano. Pero también es cierto que la cinta no se aprovecha de personajes irreales o de animales que hagan cosas que realmente no pueden hacer. Por lo que en ese sentido es algo más "realista" dentro del evidente corte fantástico que tiene el que unos niños salgan al espacio.

A nivel técnico, una escenificación muy buena. El equipo de Enrique Gato tiene calidad. Lo que ocurre y ese tal vez sea el problema, es que no sea de Disney y no se dediquen a hacer musicales. Y a mí personalmente me encanta Disney, pero existe también buena animación al otro lado del Atlántico. Aunque no emocionen igual los argumentos, si bien la presente lo llega a hacer en algunas fases.