Partimos de la consabida idea de que esta película es mala, pero no me parece tan sumamente nefasta como las críticas que ha venido recibiendo una vez que la película se alejaba en el tiempo. Me parecen demasiado oportunistas esas críticas. Es cierto que el producto en sí es una cutrez, pero en muchos aspectos trató de plasmar al celuloide un cómic. De hecho, las situaciones de la película en sí son en su mayoría disparatadas: un coche volando, Sherlock Holmes, Hulk en versión azul, Los ángeles de Charlie... Es una auténtica película de culto, precisamente por la locura de su guión, su vestuario más propio de una tienda de disfraces de carnaval, escenas tontas como la del parque de atracciones, etc...

Los hermanos Valtuille no lo hacen nada mal. Fue prácticamente su única incursión en el cine y a nivel nacional han quedado prácticamente olvidados.

Lo mejor, sin duda es la fantástica interpretación de Joan Monleón en el papel de Don Pantuflo Zapatilla. Desconozco si en la nueva producción que prepara Oskar Santos buscará a algún Pantuflo, pero de entrada dudo mucho que lo encarne tan bien como aquél. También es de destacar que en los créditos deja bien claro que son personajes de Escobar. Lo recalco porque por aquél entonces Bruguera se encontraba en litigios con varios de sus trabajadores historietistas.

Lo peor, aparte del personaje de Doña Jaimita (que parece tener algún retraso), resulta demasiado ajena la introducción de piezas musicales. Y es que el año de su estreno coincidió con el auge de grupos infantiles como Parchís. Es el principal lastre de la película, que además trató de imitar esas cintas de lamentable gusto artístico pero de tierno encanto para los niños.