Poco voy a aportar a lo escrito ya. Esta película confirma que independientemente de la calidad técnica de las películas españolas, éstas lamentablemente suelen adolecer de un guión mal desarrollado y de un star system de segunda división. La historia de Agnosia pasa de despertar curiosidad a provocar vergüenza ajena (escena final) y Noriega promocionó tramposamente la película como actor principal cuando no consigue dotar a su personaje (ya de por sí irrelevante) de un mínimo de empaque. Además, su director confía demasiado en que haciendo de BARcelona un Londres victoriano conseguirá dotarle de ese toque de sordidez e incluso de terror que pueden tener recientes (buenos) ejemplos como “The prestige” o la serie de la BBC “The crimson petal and the white”. ¿por qué ambientarla en esta época? Pues por capricho, porque la película no aprovecha ni mínimamente ninguna de sus características del fin de siglo XIX catalán: lucha de clases, avances técnicos, represión moral, etc.
Todo muy estético y todo muy vacío.