Llegamos al final de este fenómeno mundial de “Cincuenta sombras de Grey” tanto cinematográfico como literario, capaz de dividir a los críticos de todo el mundo poniéndola de vuelta y media y ganando numerosos premios Razzies año tras año y sin embargo vender más entradas anticipadas y llenar los cines como ninguna otra y repito COMO NINGUNA, ni Star Wars ni grandes directores como Nolan o Cameron consiguen lo que esta saga es capaz de hacer sobre todo en el público femenino. Esto es algo que me sorprende mucho tanto que no le encuentro una explicación “lógica”. Yo he ido al cine desde que tengo uso de razón y NUNCA había visto una reacción así en las salas de cine (repito sobre todo por el público femenino) NUNCA había visto una venta de entradas anticipadas tan masiva como con esta trilogía, Nunca había visto las salas llenas tanto en el estreno como en los días posteriores y NUNCA había visto esta reacción en el publico (especialmente el femenino) de pasión y curiosidad por esta historia con tan altas dosis de erotismo y romanticismo tanto es así que conozco muchos casos (bastantes) que SOLO van a ver esta película al cine en todo el año. Por todo esto yo valoro bastante esta trilogía y la pongo al nivel de lo que significo en su momento “Nueve semanas y media”.

Pero centrándonos en la película después de una primera parte algo más suave de lo esperado pero con una historia que enganchaba nos llegó la segunda con cambio de director y una mayor dosis de erotismo, más directa y contundente y más densa argumentalmente que añadía bastante secundarios a la historia, esta tercera empieza directamente con uno de los momentos más esperados por los seguidores de la trilogía y sorprende que se pase por ello de una forma tan rápida y precipitada, es más los primeros 30 minutos de película están claramente acelerados perdiendo así la oportunidad de aprovechar momentos y lugares con mucho potencial. En su parte central la trama se relaja y nos muestra los problemas habituales de un matrimonio, la desconfianza, la necesidad de crear un espacio propio en la relación, etc… mostrándonos a una Anastasia que evoluciona notablemente a una mujer con carácter que toma sus propias decisiones y que tiene las ideas muy claras algo radicalmente opuesto al personaje que vimos en la primera parte mucho más insegura y desconfiada.

En el tema de las escenas de sexo se mantiene un alto nivel de erotismo con multitud de escenas pero en esta ocasión mucho más cortas y directas dejando una sensación de repetición he incluso algunas recuerdan bastante a “Nueve semanas y media” cambiando el hielo por el helado. En general en esta tercera parte el erotismo esta menos elaborado que en las anteriores dando más importancia a la historia de la pareja. La Banda sonora sigue el estilo de la saga dejándonos canciones potentes e incluso recuperando alguna anterior.

En su parte final la película no sorprende y nos da lo esperado, dejando claro que estamos al final de la historia y dejando algún regalito claramente dirigido a las más fans en forma de video recopilatorio en mi opinión innecesario.

En definitiva termina esta saga con tres películas bastantes diferentes entre sí que dejan claro que la mezcla entre romanticismo y erotismo funciona y muy bien y que interesa al público, por eso aunque esta pareja termine su historia estoy seguro de que en un futuro veremos más que compartan este estilo y esta carga erótica porque ha quedado demostrado que interesan y llevan a la gente a las salas de cine que es lo que realmente importa.

Lo mejor: La evolución de los personajes en especial la de Anastasia, el nivel de erotismo se mantiene muy alto y la banda sonora.

Lo peor: Hay momentos en donde se nota acelerada, deja una sensación de poca sorpresa y de repetición, algunos momentos de la trama son un poco “inverosímiles”.