A pesar de que es lo mismo nuevamente, he de decir que me lo pasé mejor que con la secuela. Sin embargo, no llega a alcanzar la magia de su primera parte. Ice Age 3 consigue que los mini cortos que acompañan la aventura interpretados por nuestro querido Scratch y que actúan como cortinilla acaben siendo pesados y cansinos. La inclusión de ese romance es soso y aburrido, y sus intervenciones tienen un nivel muy por debajo del de las otras películas.

Pero centrémonos en la película, que es lo que importa. La manada se ve ampliada cada vez más, y los protagonistas van perdiendo en profundidad. Sid en cambio gana muchos puntos y sin duda es el más gracioso de todos los miembros, por encima de la ardilla bellotera.

Sin embargo, a pesar de que cuenta con grandes cosas (una animación mucho más colorida y variada), empiezo a estar cansado de que todas las películas de animación tengan exactamente la misma estructura. Se repite lo de siempre, y no hay lugar alguno para la sorpresa. Todo lo que puedas intentar adivinar de la película al cuarto de hora se va a producir.

Buena animación y buenas sensaciones, pero se perderá en tu mente si ya has visto unas cuantas del género.