La segunda versión cinematográfica de Expediente X, una de las mejores series de todos los tiempos sin lugar a dudas, vuelve a ser una estafa para los fanáticos que van a presenciar con pavor como se ha vuelto a hacer un capítulo largo, sin más.

El agravante esta vez es que hemos tenido que esperar mucho para volver a ver a Mulder y Scully. Con la anterior película al menos quedaba el consuelo de la serie reciente, esta vez no. Simplemente, esta película parece como si hubiera estado rodada por un relativo admirador de la serie que quiso volver a revivir a la pareja protagonista, sin saber coger la esencia de Expediente X, pero no es así ya que es Chris Carter el director, lo cual hace todo más incomprensible.

Porque seamos sinceros, todos esperábamos que después de tanto tiempo la temática de la película fuera la temática estrella de la serie, los alienígenas. recuerdo ver Expediente X y casi rezar para que el capítulo que iban a emitir tratara sobre alienígenas. Esta película puede estar al nivel de algun buen capítulo de la serie, pero no a la altura de aquellos donde los alienígenas eran los protagonistas.

Alienígenas. Samantha. El Fumador. Al menos aparece Skinner, grata sorpresa, pero todo eso es lo que falta para que esta película pudiera haber sido fascinante. Despues de tantos años los admiradores de la serie queríamos algo más que un capítulo largo que ni siquiera responde a ninguna de las preguntas. Para más inri, "I want to Believe", referencia clara al mítico póster que siempre estuvo relacionado con los alienígenas y no con cuestiones religiosas como versa esta película.

Como thriller puede pasar, pero con ese nombre no va a ninguna parte. Si esta película la hubieran protagonizado otros actores y hubieran cambiado el nombre a los personajes hubiera pasado sin más, ya que no hay referencia casi alguna a la serie. No es magnífica ni mucho menos, es más bien mediocre dentro de lo macabro. Para colmo, jamás llegué a ver química alguna como pareja sentimental a Fox Mulder y Dana Scully, todo lo contrario a lo que transmiten como pareja de federales, sin duda una de las mejores relaciones entre personajes que han pasado por las pantallas. El romance entre los dos es tan frío como innecesaria es la película entera.

Para lo único que sirve esta película es para maldecir a aquellos responsables de ella, que por desgracia son los mismos creadores de una de las series más importantes jamás hechas. Una vez superado el momento en el que reaparecen ambos personajes (que tampoco me pareció acertado) y se te baja la emoción de verlos juntos la película es tan sosa que te la pasarás recordando momentos de la serie, no porque la película los evoque, sino porque la serie era tan buena que quedaron grabados en tu memoria. Despertará una nostalgia en tu interior equivalente a lo innecesaria que es la película.