Está claro que no nos encontramos ante la octava maravilla del séptimo arte, ni siquiera dentro del género del humor; no es algo sumamente maduro y sesudo; tampoco es RESACÓN EN LAS VEGAS, pero hay que reconocerle algunos méritos, que los tiene… Claro que los tiene, como por ejemplo su argumento que, aunque bastante cafre y gamberro (como casi todo en esta cinta), está más elaborado que el de otras producciones más apreciadas. Hay un gracioso enredo al que los personajes se enfrentan como pueden (es decir, con drogas, alcohol y poco cerebro). Su humor, a menudo pisotea los límites del buen gusto y lo políticamente correcto, pero llega a arrancarte una risa por las ocurrencias y desventuras de los protagonistas, a poco que "liberes tu mente". Los diálogos no están nada mal, teniendo en cuenta el "nivel cultural" de los personajes y las interpretaciones de los actores cumplen de sobras para el producto que es. Los demás apartados técnicos a buen nivel... Y poco más… UNA GROSERA Y DESTERNILLANTE DESVENTURA PARA GENTE SIN REMILGOS Y NO MUY EXIGENTES.