La película empieza con una trama estúpida donde podemos apreciar que el protagonista es una clase de superheróe, donde todo lo que hace y dice él, es fantástico y maravilloso.

Se enamora y se predicen todas pero toodas las escenas como hasta los últimos 20 minutos.

Aquí nos encontramos la diferencia.

Nos encontramos con una o dos escenas dignas de nombrar y bueno, luego nos encontramos con el final, el cual tampoco no es nada del otro mundo, pero es algo que podríamos llamar "inesperado" (aunque en realidad no fuese tan inesperado).

Y con esta gran carga emocional transmitida en los últimos 20 minutos, este cliché deja de ser tan cliché y de las 4 estrellas que le iba a dar, subió a 6.