Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Fascinoscopio:
6
Acción. Ciencia ficción. Thriller. Fantástico Lucy, una joven obligada a ejercer de mula de una nueva y potente droga, adquiere de repente enormes poderes sobrenaturales cuando la bolsa de la droga se rompe y los narcóticos entran en contacto con su cuerpo. Entonces, su cerebro comienza a aumentar la capacidad de uso hasta poder ser utilizado al 100%, convirtiéndose en una máquina letal con habilidades extraordinarias. (FILMAFFINITY)
13 de septiembre de 2014
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Morgan Freeman, que en los últimos tiempos ha prestado cara y voz a documentales científicos, aprovecha esa imagen de prescriptor de lujo para meterse en la piel de un investigador cuyas intervenciones en Lucy sirven de excusa para clasificar la película dentro del género de la ciencia ficción. Por aquello de que tiene que haber una teoría científica que legitime el argumento.

Así descubrimos que el cerebro humano podría acceder a aptitudes aún desconocidas si emplease un porcentaje superior de su capacidad. Paralelamente, Scarlett Johansson (que los avispados habrán identificado ya como la Lucy protagonista) se ve atrapada por un grupo de narcotraficantes que pretenden usar su cuerpo (no son listos ni nada, que no han escogido a Betty la fea) como vehículo de transporte de una droga experimental. Un par de patadas mal dadas, la droga llega al torrente sanguíneo de Lucy y… ¡Voilà! Ya tenemos a una súper mujer con todo tipo de poderes.

Esta disculpa más o menos artificiosa (incluso disparatada) sirve para guiar al espectador por un correctamente construido film donde Luc Besson vuelve a mostrar su pericia cinematográfica. La audiencia disfruta de una historia bien contada que cumple los requisitos de otro género: el de acción. Violencia explícita, trama policíaca, persecuciones trepidantes, efectos especiales, un protagonista fuerte y, cómo no, una cuenta atrás para animar el final. Además, y sorprendentemente, Luc Besson no cae en la petulancia que algunas de sus imágenes simbólicas podrían hacer temer.

También hay que destacar a una convincente Scarlett Johansson. Ella lidera un elenco al que arrastra en un rol que homenajea más que presumiblemente a Nikita. Pero lo que más se agradece: noventa minutos de duración que hacen prácticamente imposible que dé tiempo al aburrimiento, siempre que el espectador se meta en el juego de una trama poco exigente que no debe tomarse muy en serio.

Publicado en blog fascinoscopio.
Fascinoscopio
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow