Irregular comedia romántica que si viene castigada por la crítica (y el público) no es por ser una comedia romántica, es por no ser constante (de ahí que sea irregular) y que aburra a ratos (de ahí que sea irregular) y que a ratos interese la trama y a ratos no (de ahí que sea irregular).
Los actores están todos bien, sin duda alguna, pero es que la historia (o mejor dicho, como está llevada a cabo) no da para más.

En cualquier caso, aunque esté fuera de lugar, desde aquí aprovecho para romper una lanza a favor de Brosman: que haga una cinta Bond ahora, una de espías, no de fantasmadas, y con un Bond realmente maduro (al más puro estilo Nunca digas nunca jamás) y será su redemción como Bond. Yo lo veo.

¿Venía este comentario a cuento de algo? Bueno, Brosman es aquí un galán un pelín mujeriego y ya madurito y sobretodo, no vale la pena invertir más tiempo en escribir de la película.

Vale, sí, un último comentario. El título de la película es un spoiler en toda regla, pero regalo de nuesto país sino miren el título original y díganme que tienen en común.