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Voto de edgarinos:
3
Fantástico. Terror. Aventuras A mediados del siglo XIV, el caballero Behman (Nicolas Cage), desertor de las Cruzadas, debe escoltar hasta un monasterio a una joven (Claire Foy) acusada de brujería. Los monjes aseguran que ella es la responsable de que la Peste Negra asole y destruya Europa. Behman, escéptico, comienza a pensar durante el viaje que la joven pueda ser inocente, pero el destino les conducirá a un lugar donde les esperan las fuerzas de la oscuridad. (FILMAFFINITY) [+]
1 de abril de 2011
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
La incuestionable caída en picado de la carrera de Nicolas Cage (si es que alguna vez llegó a estar realmente alta), se acentúa aún más al participar en una de las peores películas que ha hecho (y ya es decir).
Desde un principio se nos muestra una historia tan repetitiva, tan mal interpretada, tan mal realizada y tan mal ambientada que cuesta mucho convencerse a uno mismo de no abandonar la sala del cine pasados los quince primeros minutos.

El arranque en Tierra Santa es desastroso, no sólo por la descarada imprecisión histórica (en el siglo XIV no se mantenían las guerras en Oriente Medio entre cruzados y musulmanes, al menos no en las proporciones que la película nos hace creer) sino por los malos efectos especiales, los desesperantes e irritantes diálogos entre los personajes, y la despreciable actuación de Nicolas Cage... inventándose batallas que nunca existieron y que consisten en un grupo de soldados ostiandose sin orden ni concierto, pero ¿dónde se ha visto esto?
Entrando ya en la temática propiamente dicha del film, cabe destacar la poca originalidad y lo surrealista de cada uno de los momentos del viaje escoltando a la bruja. Como mucho puedo reconocer algún momento que me hizo reir (véase la escena de Nicolas Cage parando las flechas con una espada a lo Jedi).

Dominic Sena trata de emocionar al espectador con un patético intento de lograr un final conmovedor, pero lo cierto es que el papel de guerrero honorable con remordimientos que quiere olvidar la guerra está muy pasado de rosca.

En resumen, ni el guión, ni las interpretaciones, ni la banda sonora, ni la fotografia, ni los efectos especiales, ni el vestuario hacen que te metas en la película. Ahora bien, los tres puntos que le concedo se deben a que ciertamente (y todo hay que decirlo), hay momentos que entretienen y, como bien se ha dicho en alguna otra crítica, eso no es poco hoy en día. (Destaco en este sentido, la escena del puente. De las pocas que me mantuvieron un poco en tensión).
Por lo demás, es una película que no vale nada.

(Cualquiera interesado en la temática de las cruzadas y la verdadera aventura medieval, le recomiendo la espléndida versión extendida de "El Reino de los Cielos").
edgarinos
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