Seguramente te hayas interesado por ver esta serie animado por sus buenas críticas o porque eres un fanático del género de “novela negra” cásico donde se nos van dando pistas para acabar resolviendo al misterio.
Precisamente esa es la premisa que se nos presenta en el primer episodio: un asesinato cometido en un edificio de Nueva York que tres vecinos corrientes, que nada tienen que ver entre ellos, se propondrán resolver.

El misterio presenta de forma adictiva, pero, con el transcurso de los capítulos, se desinfla. Tras reflexionar sobre esta idea he acabado concluyendo que el misterio, aunque es la trama principal que vertebra toda la temporada, no es, ni mucho menos, lo “importante”.

Los creadores han escrito una serie donde el misterio que envuelve el asesinato es la premisa y la trama a partir de la cual se desarrollan la mayoría de las acciones de los personajes. Pero, a pesar de ser el eje sobre el que gira todo, los asesinatos son atrezzo, lo realmente importante son sus protagonizas: la relación entre ellos llena de química, su relación con el resto de los vecinos, con su pasado, como se enfrentan a las surrealistas situaciones que plantea la resolución del asesinato... todo esto es, realmente, el corazón de la serie. El asesinato, y su resolución, son solo la excusa para presentarnos y mostrarnos a sus tres protagonistas.

Salvando las distancias, me ha recordado a películas de Woody Allen como “Misterioso asesinato en Manhattan” donde el asesinato, aunque vertebra la historia, es el gancho para contar las peripecias de sus personajes.
Tras ver la primera temporada completa y la segunda hasta el capítulo 8, ambas temporadas tienen las mismas virtudes y los mismos defectos.

- Naufraga en hacer que el misterio que envuelve al asesinato sea realmente intrigante. Falta tensión (sobre todo en la segunda temporada), orden, ritmo e intriga en la resolución del crimen.
- Acierta en la relación entre sus tres protagonistas.
- La primera temporada acierta totalmente en la propuesta de personajes secundarios que acompañan al trio protagonista, sin embargo, en la segunda los personajes son poco interesantes.
- La idea del podcast es original y da grandes momentos de comedia.
- Las escenas cómicas están bien escogidas, son originales y, siendo absurdas, no caen en lo ridículo o en lo ordinario.

En resumen, si crees que vas a ver una serie al mas puro estilo "novela negra" te decepcionará. No es una serie donde lo importante es descubrir al asesino. Siéntate frete al televisor con ganas de disfrutar de una comedia sutil, original y absurda con un toque de formato clásico. Si vas con esas expectativas se puede convertir en un divertido "gulty pleausure".