Aburrido vehículo para el lucimiento de Kelly y un Cary Grant que aún nos daría muy buenos momentos junto con su pelirroja compañera de reparto en "Con la muerte en los talones". Desgraciadamente este no es el caso. Esta película no aporta nada a la filmografía del genio británico excepto , suponemos unas lujosas vacaciones en Mónaco y la Riviera francesa. Alguna secuencia conseguida para la época como la de carreras de coches(queda en el recuerdo el accidente que mató a Grace Kelly ) y un tono libertino cuando no calentorro que si bien tímido no deja de ser insistente durante todo el metraje.
El esnobismo y el vestuario( entran las grandes marcas de moda en liza) así como la sofisticación deseada y las bellas postales turísticas no logran dar cuerpo a una trama hueca, cuyo argumento ni siquiera esta hilvanado y con unos protagonistas antipáticos que vistos hoy día, no gozan de la sofisticación deseada ni despiertan, seamos sinceros, el interés del espectador.