La película más plana de Aménabar a mi humilde entender (vale que yo nunca cuento "Los Otros" pues me parece que fue más una gana suya de entablar algún proyecto con la mujer de su amigo Tom Cruise).
Hay quienes dicen que para calificar hay que tomar en cuenta que la peli es española.
Hay quienes dicen que para calificar hay que olvidarnos del cine anterior de Amenábar.
Hay quienes dicen que hay que tomar en cuenta el dinero gastado en la representación de Alejandría.
Alguno nos quiere dar una clase de historia gratuita para que así (con ese conocimiento que solo transmiten las almas cultivadas) entendamos mejor su calificación de la peli. En fin.
Yo compararé inevitablemente esta película con las primeras del director, las cuales considero brillantes y, por qué no, originales).
Aseguraré hasta la muerte que en esta nueva peli los personajes son unidimensionales y cuando no lo son no se encuentra mucho sentido en la variación extrema de su carácter: los valientes son valientes hasta que una fuerza extraña y casi incoherente los hace llorar y doblegarse, los cobardes son cobardes hasta que se necesite que sean intrépidos.
Amenábar arriesga mucho en lo divulgativo de su historia. No solo quiere apadrinar a su Hypatia y presentársela una vez más al mundo sino que quiere mostrar también todo el imperio cultural y material que la rodeaba. Esta preocupación por la reconstrucción histórica (independientemente de que se ciña o no a los datos "reales" del personaje histórico) lo aleja muuucho de lograr lo que antes había tan buenamente conseguido (no estoy tomando en cuenta "Los Otros") y pierde dinamismo, profundidad, y cohesión.
Lo peor de la peli es cuando quiere forzar el dramatismo de ciertas escenas recurriendo a cámaras lentas o planos de rostros acongojados con melodías plañideras de fondo. Sus planos de Google Earth tampoco se los celebro pues no encuentran una ligazón verdadera con toda la acción Que parte de la historia se avance con "letritas" (hablamos de varios párrafos) nos corta el fluir de la peli del modo más frío posible y demuestra su gana de abarcar demasiada información.
Es una peli correctísima, no digo lo contrario. Pero ahí va un poco mi preocupación: Amenábar podría estar convirtiéndose paulatinamente en un "director estadounidense (entiéndase Hollywoodense) medianón".
Me preocupa. No me gustaría que se despierte una mañana y al mirarse al espejo sea Steven Spielberg.