Creo que es la película que yo haya visto que mejor captura la absoluta desesperación y falta de esperanza de las tropas empujadas a la carnicería del frente occidental de la primera guerra mundial. Y tampoco está nada mal en el departamento puramente bélico, mostrando el tremendo efecto psicológico de las nuevas armas como los tanques, los lanzallamas y el gas en los soldados que no estaban preparados para enfrentarse a ellos, en particular una maravilla la importancia del combate cuerpo a cuerpo en los espacios cerrados de las trincheras.
El gran fallo que le he encontrado a la película es que le sobra mucho, mucho metraje. Toda la subtrama de las "negociaciones" entre los enviados alemanes y los franceses para mí no aporta nada y sólo distrae de lo esencial, que es la experiencia de los soldados en la línea del frente.
Da que pensar que más de 100 años después, con drones, tanques, municiones merodeadoras, fusiles de asalto, miras térmicas y un cambio total del paradigma de la guerra... al final tengamos en el Donbass soldados luchando trinchera a trinchera de una forma bastante semejante a la Primera Guerra Mundial.