La premisa no era mala, los actores son creíbles, su guión interesante..., pero, a medida que avanza la película la incredulidad se apodera de nosotros. Algunos actores no sabes qué hacen ahí; una de ellas está, de repente mucho más borracha que hace 2 minutos; otro se ha vuelto loco y no habla. En fin, que de lo regular, todo se vuelve un auténtico fracaso y un aburrimiento. Un atropello de película.