Y es que Ed Wood quería ser inmortal, como lo es Orson Welles, exacto, uno no muere mientras sea recordado... gracias a su genial entusiasmo por hacer cine consiguió su sueño, ¿pero a que dramático precio?, esto es lo que nos quiere contar Tim Burton en este magnífico drama disfrazado de comedia que despliega ese gran quid en su momento final, momento que increiblemente ocurrió tal cual.

Toda esta esencia perfectamente llevada por Burton (en mi opinión su mejor trabajo hasta la fecha), destacando, como no, el gran trabajo de Depp y Landau y en definitiva de todo aquel que tuvo que ver con esta película.


ED WOOD gracias por haber sido tan pateticamente mal director de cine, pero al fin y al cabo, director de cine, recordado como el peor de la historia (quien le catalogó como tal debería ver alguna pelicula del "maestro" Uwe Boll)