Nos sedujeron con un trailer visualmente hipnotizante que te dejaban con todas las ganas de disfrutar de esta película a ser posible en el cine o en HD en un televisor enorme. Me decepcioné cuando no llegue a verlo en la primera opción pero tras verla en la segunda, agradecí no haber gastado mi dinero.
Totalmente carente de originalidad, con personajes insulsos, repuestas tópicas y una trama contada de manera lenta y algo confusa. Todo eso acompañado de unas grandes rebanadas de sexismo. En concreto solo 3. Dos de ellas que si llevaran la piel pintada de traje no notariamos diferencia, con escena gratuita de ducha incluida; y una tercera que podría considerarse casi literalmente una mujer flor.
Solo con estética uno no se traga las casi dos horas de película, estética que en realidad ya habíamos visto en películas como Final Fantasy: Advent children. Con diseños poco originales o interesantes.
Eso sí, cada minuto que sale el capitán en pantalla derrocha tanta epicidad y misterio que casi consigue hacer que te olvides de lo demás. Pero no hay suficientes minutos de este hombre en pantalla, y eso que da título a la película, como para distraerte de la pobre trama.