Esta es una película de aventuras, un poco exagerada si se quiere y con unos golpes de efecto, tanto en el guión como en el desarrollo visual que le restan credibilidad por fantasiosos, pero comparada con la actual Everest, es una obra de arte. Tiene tensión, tiene sarcasmo, una dosis de crítica, romanticismo, gran dosis de sufrimiento y como no: sacrificio. Pero hay escenas que te cortan la respiración y estás en tensión gran parte del film. En ambas las escenas rodadas en estudio se notan mucho. Creo que límite vertical tiene más tensión y mejor guión. La recomiendo a los que han visto Everest, como fue mi caso y salieron decepcionados, y para los que no han visto ni una ni otra y tengan que elegir, directamente ahorrarse Everest y elegir Límite Vertical. Es más sincera, aunque sin perder de vista que es una película de aventuras. La presencia de Scott Glenn (el silencio de los corderos, Llamaradas) le dota de un plus de genialidad interpretativa.