Está claro que una de las influencias de Drew Goddard para realizar esta película es Quentin Tarantino. Por la manera en la que cuenta la historia con esos saltos temporales, esos letreros que nos indican los cambios y ese uso por la violencia, es imposible no ver la influencia del director de una película muy similar a lo que ofrece "Malos tiempos en el Royale": "Los Odiosos Ocho". Sin embargo, aunque la influencia es patente, no me parecen comparables.

El hotel El Royale es una vieja gloria situada en el borde entre California y Nevada. Aunque ha visto mejores días, tiene la suerte de recibir a cuatro huéspedes el mismo día: el vendedor Laramie Seymour Sullivan (Jon Hamm), la cantante Darlene Sweet (Cynthia Erivo), el padre Daniel Flynn (Jeff Bridges) y una joven desconocida (Emily Summerspring). El hotel solo cuenta con Miles Miller (Lewis Pullman) como empleado, que se encarga de todo lo del hotel. Sin embargo, en El Royale están a punto de suceder unos eventos que alterarán la tranquilidad de sus inquilinos.

El problema de la película es precisamente la influencia de Tarantino. Hereda muchos aspectos de las películas de Tarantino, sobre todo de la ya mencionada "Los Odiosos Ocho" (tanto por premisa como por manera en la que se desarrolla la historia). Pero hay un aspecto que Drew Goddard no copió de Tarantino y es el que acaba haciendo mucho daño a la película: el carisma de los personajes. Mientras que en la cinta de Tarantino nos hacen una secuencia para presentar a los principales personajes y luego nos van describiendo poco a poco a los demás, aquí a la mayoría los tiran rápidos todos de seguido y aunque algunos sí que se van haciendo cada vez más interesantes, algunos simplemente no producen nada y pasan sin pena ni gloria por la cinta.

Por suerte para esta película, mejora a medida que va pasando el tiempo. Tanto Cynthia Derivo como Jeff Bridges son los dos personajes más interesantes de toda la cinta. Si, podría incluir a Chris Hemsworth en la conversación y Lewis Pullman en la conversación, pero el primero no aparece hasta el último tercio de película (aunque cuando entra lo hace por lo grande) y el segundo no ofrece mucha cosa hasta casi el final de la cinta.

¿Es "Malos tiempos en el Royale"? No, para nada. Creo que su mayor defecto es que tengamos que compararla con las cintas de Tarantino de las que ha bebido mucho. Tardar tanto en definir sus personajes y presentar a alguien con verdadero carisma en escena hace que la película pierda mucho durante gran parte de su película. aunque a medida que va pasando el tiempo su calidad también mejora.