A simple vista, podría parecer que "Capitán Phillips" es la típica americanada en la que los estadounidenses demuestran su poderío y los somalíes demuestran ser unos salvajes. Pero Paul Greengrass no es esa clase de cineasta.

En esta película, los piratas somalíes son presentados como salvajes villanos pero, poco a poco, nos sorprendemos sintiendo una extraña empatía por ellos. Nuestro temor nunca desaparece, pero entendemos que hay un motivo para sus acciones. Si ellos pudieran elegir otro tipo de vida, lo harían, pero eso no es posible en Somalia: "Maybe in America", dice uno de los piratas en una escena clave de la película.

Greengrass narra en "Capitán Phillips" un thriller muy emocionante que mantiene al espectador pegado a la pantalla durante sus nada largas dos horas y cuarto de duración. Como apoyo, tiene a un Tom Hanks en estado de gloria que pone fin a su "etapa invisible" con una de sus mejores interpretaciones. Las interpretaciones de todo el reparto respiran sinceridad, a destacar las de los cuatro desconocidos que se transforman a la perfección en los piratas.

Una película de acción magníficamente rodada y editada que invita a reflexionar sobre las desigualdades de este mundo de una forma única.

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