Una película realmente sorprendente, recupera el espíritu a la perfección de un género que estaba aparentemente muerto como el musical. Mucho mejor que su casi coetánea MOULIN ROUGE, al menos aquí ofrecen números musicales espectaculares, llenos de colores vivos y brillantes, una puesta en escena fascinante y canciones originales y muy pegadizas. Con unas buenas interpretaciones, fantástica Catherine Zeta-Jones (que además estaba embarazada durante el rodaje, y ¡vaya como se mueve!) y merecidísimos 6 Oscars incluyendo a la "Mejor película". "Chicago" fue para mí una gran sensación, no me esperaba que fuese tan fascinante, tan entretenida y tan maravillosa. Sin lugar a dudas una joya de la década. SUBLIME.