Algunos detalles... El capitán Vidal, padre de la criatura que viene, es un tio malo malísimo, sanguinario, lleno de tacos de macho que quiere tener un hijo para perpetuar su noble estirpe (suena casi Torrentiano).
A todo esto, la cosa es muy familiar, el molino no muele, los republicanos acampan a tres metros del campamento de los fachas (50 a lo sumo), y asi se pasa toda la pelicula en un ambiente chusquero de teatrillo de cuarta, en el que unos y otros se agolpan a un lado y otro del escenario.
Por si fuera poco, Ofelia, la hija putativa, descubre que a 20 metros del molino hay un laberinto de piedra con frisos de aspecto bastante pagano en el que nadie se ha fijado, ni si quiera los fachas (si, es estúpido... ni idea, pregúntenle a del Toro), solo Maribel Verdú, que luce toda la pelicula un acento regional dificil de identificar, le dice, así como si nada, que es un laberinto y punto... y que no se acerque... ¡¡pero si está a 20metros del molino!!.
Mientras el director se recrea por completo en la crueldad y el sadismo explícito propio de otro tipo de películas, la niña descubre que en el centro del laberinto prohibido hay un pozo dentro del cual se esconde un ser mágico que le dice que es una princesa de un mundo subterraneo, pero que debe de pasar tres pruebas antes de llegar a él. Esta es para mi la parte central de la pelicula, lo realmente bello y novedoso, pero el director apenas lo trata de un modo lateral prefiriendo reiterarse en la historia de "los mayores", por desgracia una continua escabechina, innecesariamente gore, absurda hasta la extenuación, que no tiene credibilidad en su exposicion y que con tal de dar alas a la crueldad sádica del superfacha, tira de cualquier requiebro argumental que permita al susodicho demostrar sus dotes picando carne.
Así la historia adulta avanza puerilmente mientras se intercalan pequeñísimos apuntes de las aventuras de Ofelia que, por fin, en una orgia de bombas y victoria republicana, alcanza su sacrificio máximo cuando es asesinada por el superfacha en el laberinto -por cierto, vaya mierda de laberinto- y su sangre inocente le permite acceder al reino subterraneo donde su padre y su madre reinan por mil años, ya que están subidos en unos tronos (literalmente) tan altos que se podrían romper el cuello solo de intentar ir a hacer pis (asi que supongo que el rey se escanciará unas sidras desde allí mismo, sobre el cubo de orin real).
Pestiño pueril con buena base técnica y dirección, guión y todo lo importante, deplorables.

(1)por ejemplo cuando se dejan el antibiotico del médico en medio del bosque para que el superfacha pueda atar cabos, cuando asaltan a golpe de dinamita el almacen de comida pero el cutrecandado lo abren con una llave-casualmente lo que debería ser copia única- para poner al descubierto a la paisana infiltrada -Maribel Verdu-...