Cuando me acerqué a esta cinta pensaba ver una nueva comedia disparatada del irregular Schneider. La típica comedia de gags locos, irreverentes, acorde con los tiempos liberales en que nos movemos, y que es lo que en definitiva le ha llevado el triunfo y la fama a éste pequeño gran actor de comedia.
La sorpresa es que el Sr. Schneider esta vez, ha dejado atrás los chistes fáciles de culo, pene, teta, sexo, para intentar hacer algo más digno. Algo relacionado con conservar la espiritualidad y la sintonía con la naturaleza en medio de la agresiva sociedad materialista y egoísta actual.
La película está formada por pequeñas cosas, engarzadas en una base de situaciones familiares y personales realistas, y factibles totalmente, con las que podamos identificarnos.
Pronto nos vamos dando cuenta, conforme avanza el film, de que se trata más de un drama con toques de comedia que de lo contrario; el humor light enmascara secretos y rasgos de personalidad que deben ser descubiertos y redimidos, y es ése viaje el que nos hace sentirnos identificados con el personaje central y sus dilemas existenciales.
Se trata de un entretenimiento familiar, blando y apenas condimentado, eso es cierto, pero para éste servidor que les escribe, resultó un agradable respiro entre tanto cine extremista y efectista, y un recuerdo de otros tiempos en que existía mayor inocencia y realismo en las originales historias que se nos contaban. Por eso, le he dado más que un aprobado, aunque no llegue a notable.