Si bien presenta un comienzo más o menos interesante en la convivencia de dos pensamientos antagónicos, un profesor liberal educado en las grandes ciudades y un padre conservador que lo ignora prefiriendo a su otro hijo, poco a poco se va perdiendo el interés con una serie de lugares comunes, como el típico viaje por carretera, escenas aburridas y escenas retrospectivas que no parecen aportar nada interesante al espectador. El filme no captura, y pierde fuerza desde la primera parada del viaje. Esperaba algo mucho mejor que una cinta ¿autobiográfica? del escritor de American Beauty, notable película dirigida por Sam Mendes y que por el contrario, cuenta con un premiado guión cinematográfico.