Probablemente uno de los peores dramas bélicos que jamás se hayan rodado. Este bodrio desaprovecha una interesante historia que podría asegurar una película realmente épica y emocionante, para perpetrar en su lugar un drama descafeinado, falto del más mínimo interés, y lo que es peor, carente completamente de argumento.

Efectivamente, más allá de contarnos como gente perseguida huye y se refugia en un bosque, no encontramos mucha más chicha por ninguna parte: Daniel Craig parece un híbrido entre Gladiator, Rambo y Moisés; no es posible identificarse con planísimos personajes tales como el intelectual judío, el joven romántico e inexperto, el despistado graciosete, el egoísta que jode la convivencia del grupo o el bruto cariñoso; no hay un nudo o un desenlace claros; las localizaciones se reducen única y exclusivamente al bosque de marras y a un pueblo; no hay ningún clímax, y no hay adversarios definidos con un mínimo carisma (los alemanes parecen poco menos que peleles que aparecen de vez en cuando en escena).

En definitiva, a veces da la sensación de que su única finalidad radica en funcionar como panfleto projudio excesivamente victimista y sensiblero en el que reiteradamente se utilizan los símbolos de esta religión (Caín y Abel, Moisés, el éxodo...), y que lo único que nos ofrece es asistir, con nula empatía, a las aburridas peripecias que suceden a una gente refugiada en un demasiado confortable campamento en medio del bosque.

P.D. Además, teniendo en cuenta lo que está sucediendo estos días en Gaza, asistir al visionado de este filme es todavía más sangrante...Las víctimas serán los verdugos...