Zoolander es una de las películas más estúpidas mejor logradas en toda la puta historia del cine. Ben Stiller en su trabajo más arriesgado logra hacer una comedia única, llena de sátira, criticando al mundo superficial de la moda y parodiando una que otra película de culto (2001: A Space Odyssey y The Godfather: Part II).

Está de más decir que el reparto contó con las estrellas más reconocidas del inicio del nuevo milenio, desde músicos como Fred Durst, Lenny Kravitz y David Bowie hasta actores de la talla de Milla Jovovich, Natalie Portman y Winona Ryder. Todos participando en una película para el recuerdo.

Derek Zoolander (Ben Stiller) es el modelo masculino más exitoso por tres años consecutivos. Una vez Hansel (Owen Wilson) entra al negocio de la moda, la carrera de Zoolander empieza a decaer y perder protagonismo. Luego de reflexionar decide abandonar la carrera del modelaje, pero una extraña proposición lo hará cambiar de opinión. Ahora será entrenado para asesinar al primer ministro de Malasia (país donde la mano de obra es ridículamente barata). Solo estar consciente y los buenos amigos lograrán evitar tremenda locura.