Realmente bien ambientada en la Barcelona de 1921 (luchas entre burgueses, anarquistas, policía) esta película muestra a la industria española hacia dónde se debe dirigir nuestro cine:
a) Rememorar épocas e historias (tenemos miles) de nuestra patria que los sajones nunca van a filmar
b) Contratar actores versátiles como Tosar y Alterio
c) Puesta en escena espectacular
d) Damas bellas que adornan la historia como Adriana Torrebejano
La película eso sí tiene fallos que no la hacen desmerecer: saltos de guión, alguna escena inconexa o repetitiva, actuaciones pobres como la de la sindicalista (sin fuerza ni vigor) , problemas de dicción en alguna actriz....
Pero en general es una película de gánsters "made in Spain" muy entretenida.
Despuès de tanto bodrio subvencionado esta película es una esperanza para el futuro de nuestro cine.
Sigue la senda de 1898 Los Últimos de Filipinas, pero con más fidelidad histórica y menos tendeciosa políticamente hablando.