Desde pequeños, hemos visto en mil y una ocasiones el estereotipo del superhéroe con capa, portador de grandes superpoderes, enfrentándose a villanos invencibles. Batman, Spiderman, Hulk, Superman, son algunos de los ejemplos que se nos vienen a la cabeza cuando oímos esa palabra. "El protegido" nos muestra la verdad. Los héroes no llevan capa. No tienen superpoderes increíbles. Sus enemigos, no son colosales. Es la vida misma la que no lo enseña. Día a día. Una película así era necesario. "El protegido", es mucho más que una película. Es una lección de vida.

Mi nota: 7,2