Haz click aquí para copiar la URL
Uruguay Uruguay · Montevideo
Voto de Atilio:
2
Thriller. Drama Nueva York, año 1981 -según las estadísticas, el año con más crímenes y atracos de la historia en la ciudad-. El inmigrante hispano Abel Morales (Oscar Isaac) y su mujer Anna (Jessica Chastain) han conseguido sacar adelante con éxito su empresa de distribución y venta de gasóleo. Ahora están a punto de lograr la última pieza de su sueño americano: comprar un cotizado terreno frente al río Hudson, un enclave que les permitirá expandirse ... [+]
30 de abril de 2015
30 de 48 usuarios han encontrado esta crítica útil
Eisenstein, Griffith y otro puñado de cineastas pioneros impusieron un lenguaje visual que ha educado a los espectadores cinematográficos durante más de un siglo. Que los planos deben corresponderse con su antecesor y el que lo sucede es una regla básica que hace a la comprensión de la acción. Si un personaje sale por la izquierda en un siguiente plano (que no sea contra-plano) deberá entrar por la derecha. La dirección de las miradas entre dos personajes enfrentados por primeros contraplanos deben ser la misma. Todo esto ha hecho, con infinidad de otros aportes posteriores, posible la existencia de una sintaxis que hace entendible la escena cuando no existen diálogos y la enriquecen, aún más, cuando los personajes hablan. Esa es la razón por la que en un primer plano un personaje de frente a la cámara que mira a la izquierda ocupa más o menos el tercio derecho de la pantalla y los dos tercios de la izquierda están "vacíos" porque "dirigen" la atención al interlocutor que en ese momento no se ve porque está detrás de la cámara. Toda esta historia no es, no puede ser, un acto de fé y menos un dogma que no pueda cambiarse. De igual forma debe tomarse en cuenta que hemos sido condicionados y educados para ver siguiendo esas reglas impuestas a principio del siglo pasado. Seguramente ya vendrán algunos autores que con genialidad y maestría modifiquen la sintaxis cinematográficas y con ella —y a través de un cierto período— la forma de mirar de los espectadores.

Ahora bien, al Sr. J. C. Chandor le falta estatura y, lo más importante, talento para ser uno de esos genios que cambiarán en el futuro nuestra forma de "ver cine", por ello es que su pretensión de darle a "A Most Violent Year" un estilo formal novedoso termina en una —supongo que involuntaria— tortura para los ojos del espectador. La inmensa mayoría de los planos tienen la dirección de mirada al sentido opuesto, esto es mucho más notorio en los primeros planos de personajes que dialogan enfrentados entre sí. Todos los personajes se ubican en un tercio de la pantalla y su postura y mirada se dirigen hacia el marco que delimita ese tercio. Más claro: un protagonista de frente a la cámara, ubicado en la zona izquierda de la pantalla mira también ¡a la izquierda! dejando las dos terceras partes ubicadas a la derecha literalmente sobrantes, como si la cámara estuviera mal ubicada. Este pretencioso ejercicio formal hace muy, pero muy difícil el visionado de la película. Todo el filme está construido así, pero si se quiere un ejemplo bien acabado de este disparate obsérvese la escena adentro del subterráneo en la cual el espectador pierde completamente la noción de adónde dirigir la atención.

Aunque no he tenido la capacidad de síntesis necesaria, solamente por lo anterior esta película es una muy, muy mala obra. Pero no es lo único. (sigue en la zona "spoiler")
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Atilio
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow