Por suerte o por desgracia yo soy uno de los que "sufrió" con la película de Raimi y por lo tanto no entré puro a la sala de cine. En el cine actual hay la insana costumbre de darle mascado el argumento al espectador como si no pudiera discurrir por sí mismo. La introducción de la película es clara muestra de ello. Son datos que no aportan nada a la trama y que solo está hecho por el deliete de enseñar lo que nos espera (señores guionistas, dejadnos intuir algo antes de enseñarnos la carta de lo que vamos a comer)
Un último palo y vamos a destacar lo bueno: El protagonista (Shiloh Fernandez) carece de toda expresión, va por la película como quien va por los pasillos de un supermercado.
La sombra de Bruce Campbell es muy alargada.

Ahora vamos a lo bueno de la peli. El espectador está en tensión durante gran parte de la película, (exceptuando el inicio). Las localizaciones con su decrepitud nos hace sentir ese agobio que consiguió Raimi. Los efectos consiguen que un espectador acostumbrado al gore (hablo de mí) se eche las manos a cada uno de los miembros que se van amputando a lo largo del metraje.

Mención especial para un final en que el director nos da una bofetada a todos los que vimos la original y nos da lo que queríamos ver cuando entramos a la sala. En mi recuerdo están los litros de sangre que desprendía Evil Dead.

Si quereis pasar un "mal rato" no os la perdais, y si habeis visto la original id y disfrutad de "lo nuevo"