No soy una de esas personas especialmente críticas, cuando veo una película en el cine por primera vez, (vale, miento, habitualmente es en casa y estirada en el sofá) intento olvidarme de mis más o menos conocimientos sobre cine y me propongo ver la película como producto final sin intentar basarme tanto en los tecnicismos, la fotografía o los movimientos de cámara. Y cuando vas a ver una película de acción, esto suele ser bastante sencillo, y al final, si te ha entretenido y no te has dormido, el film ha cumplido su misión.

No me dormí, ni me reí, ni lloré, ni tenía demasiadas ganas de saber qué pasaría, porqué sabía que iba a pasar. Probablemente la sensación que más se repetía mientras la veía era mi cabeza pensando "¿Qué?". No soy una gran experta en ciencia ficción, pero si hay algo que me atrae de ese género es la creación de universos. Ya sea en los grandes mitos del frikismo, como Star Trek o Star Wars, o en las colecciones más épicas de la historia, como El Señor de los Anillos, o incluso en videojuegos de rol, o de acción, como The Elder Scrolls o Red Dead Redemption, que viene muy bien para hablar sobre películas de Cowboys. El universo generado para que los personajes tengan sentido dentro de él, y todo lo que se hace y se dice es comprensible para el espectador, porque está en la historia, porque está en la ficción de quien lo crea.
Un universo gigantesco y enmarañado no siempre es necesario, los zombies se pueden levantar porque si, y no siempre es necesaria una empresa maligna, o el diablo haciendo de las suyas. Los aliens pueden atacar, y no siempre es necesario explicar de dónde vienen ni porque atacan, simplemente atacan, y los humanos contraatacan. El problema es que la película quiere ir más allá, y después simplemente no va.

La idea de alienígenas atacando en el Oeste es tan descabellada como aliens atacando en el 2011, pero es, por no haber sido nunca utilizada, una novedad. Y podría haber sido explorada de mil maneras distintas, esta no es, ni mucho menos, una buena forma de hacerlo.
La película se queda corta en los personajes, en la justificación de los personajes, en el propio universo que ella misma crea, lleno de recuerdos, pasados, mundos lejanos, extraterrestres, pueblos, culturas y presentes que simplemente están allí, y sólo por estar allí, tienes que creértelo.
Una idea interesante, que entretiene como película de acción, y que pide, como película de ciencia ficción, un guión mucho más decente que el que tiene y o bien muchas más horas de metraje o las mismas horas bien aprovechadas.

Qué desaprovechada está Olivia Wilde en todas las películas que hace.