Película de ambiente post apocalíptico ambientada en la edad media después de los estragos de la peste bubónica. Combina bien el deseo y la necesidad de una familia en una país vacío, lleno de cruces en el suelo recordando a los que murieron y ahora yacen enterrados, y los grupitos de bestias que va por los caminos asaltando y matando por cualquier cosa y casi por deporte. En particular destaca la mala de la peli con su trauma que la hace enloquecer y que originó la ignorancia de los vecinos tratando de buscar un "culpable" de la plaga. La adolescente prota con la niña pequeña a cuestas primero huirá buscando sobrevivir, hasta que comprende que de lo que se trata es de vivir y luchará por ello.

Así es la vida, unos suman y otros restan: los primeros construyen y hacen crecer, y los segundos quitan y se cargan todo lo que pueden.

Está bien contada y sabe ir gestionando la tensión. Resulta entretenida. Le pondremos un 7.