Regreso al futuro II de Robert Zemeckis es una cinta de ciencia ficción y aventuras con toques fantásticos y de humor. Dirigida con un ritmo trepidante y con el estilo personal de la saga y el director, es algo sensacionalista pero efectiva y notable continuación, siendo en definitiva una película merecedora de elogio y con un entramado singular que te hará cavilar para no perder el hilo. Realizada de modo inteligente tiene un resultado irresistible y de visión obligada para los amantes de la primera parte.
La fotografía es sugerente a las distintas épocas visitadas, completando un vistoso y llamativo trabajo repleto de detalles que mantienen toda la atención del espectador. La música es grandiosa, característica además de la trilogía en una estimulante labor inolvidable que pocas cintas del género poseen, cautivando a todos los públicos. Los planos y movimientos de cámara completan un notable trabajo técnico a través del uso de primeros planos, generales, travellings, aéreos, seguimiento, reconocimiento y panorámicos. Destaca también unos efectos competentes y vistosos que cumplen con su cometido.
Las actuaciones siguen en la misma línea que en su predecesora. Como protagonistas Michael J. Fox está carismático y remarcable en su papel y Christopher Lloyd genuino y auténtico en su labor, siendo apropiados los acompañamientos de Lea Thompson, Thomas F. Wilson y Elisabeth Shue entre otros. Emplea para estos la dirección artística unos vestuarios y caracterizaciones futuristas y algo exagerados pero estéticamente alusivos a las diversas épocas, al igual que los decorados muy trabajados y arriesgados en su intento de plasmar un posible pero fallido futuro.
El guion, escrito por Bob Gale y basado en un historia del director y él mismo, está repleto de emoción y continua hábilmente la historia aunque metiendo más embrollo que en la primera parte, además tiene un argumento sustancioso y repleto de intriga que capta la atención del público dando además diversos toques de humor a lo largo del film. Para esto emplea una narrativa rápida y divertida que está repleta de enigmas en un tono expresivo que conviene estar atento para no perder el hilo de la película. Destaca también el montaje con sus saltos temporales hacia el futuro y el pasado en un admirable trabajo creativo y abstracto.
En definitiva, la considero una obra necesaria y notable para continuar la saga con acierto aunque con más enredo y menos calidad que la anterior, pero en líneas generales es una cinta arrolladora y apasionante como pocas. Recomendable por su dirección, guion, actuaciones, fotografía, música, montaje, efectos, vestuarios, caracterizaciones y narrativa que convierten a Regreso al futuro II, en un film irresistible para los amantes del género de ciencia ficción.