Haz click aquí para copiar la URL
Estados Unidos Estados Unidos · Raccoon City
Voto de Maldito Bastardo:
4
Intriga. Thriller Una psicóloga y su ayudante intentan desacreditar a un vidente que ha recuperado el prestigio después de haber pasado treinta años sumido en el olvido; el problema consiste en que el cerebro casi siempre nos transmite una imagen distorsionada de la realidad. (FILMAFFINITY)
2 de marzo de 2012
69 de 102 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película queda definida en su recta final y desenlace. En ese punto habrá dos tipos de espectadores:

a) Los que vean la cara de la moneda y piensen que han visto una revisión sobre parapsicólogos, psíquicos y farsantes de “El truco final (El prestigio)” de Nolan bajo la batuta de M. Night Shyamalan.

b) Aquellos que vean la cruz de esa moneda en esas ‘luces rojas’ que salpican toda la obra y entiendan la película, pero no la comprendan por sus numerosas ‘incoherencias’ y secuencias incomprensibles que catalogaran de tramposas.

“Luces Rojas” trata de la duda de creer o no, pero también de negar y negarse a sí mismo las evidencias. Entre la verdad y la falsedad parece que la controversia se erige como nueva arma de marketing. La película de Rodrigo Cortés no sólo me parece incoherente, pese a que su idea de partida (y fin) resultaba bastante original y poco convencional, sino decepcionante. Precisamente el material con el que contaba el director de películas siempre sorprendentes, gusten o no como “Buried” y “Concursante”, parecía ser esa cinta que tenía que haber entregado Shyamalan en vez de la inefable “Airbender, el último guerrero”. El libreto invitaba a buscar la línea de unión entre Cronenberg, Lynch y De Palma insistiendo en la puesta en escena hitchcockiana, opresiva y sumamente onírica e incluso a una serie procedimental en el polo opuesto de “Expediente X” de Chris Carter. Parece que Cortés en vez de buscar un final brutal y catarsis explosiva similar a “Scanners” ha entregado una película tan plana como vistosa y efectista.

El director define su propuesta como «una bomba de relojería de apertura retardada» haciendo referencia a las resonancias que debería dejar en el espectador pasado el tiempo. Precisamente vivimos en el mundo virtual de los 140 caracteres y de las redes sociales que provocarán un aluvión de reacciones inmediatas sin ni siquiera digerir la película. No sé dentro de un año cómo veré “Luces Rojas” aunque temo que mi jugo gástrico se haya convertido en su mortal verdugo junto a esos ‘terremotos’ dignos de ‘Humor amarillo’. A día de hoy me quedo con la frase de Simon Silver: «Si no hay pureza en la intención, puedes acabar creando monstruos» porque realmente define la propuesta. Las intenciones de Cortés son puras, pero su libreto y montaje me resultan tramposos e incoherentes, plagado de lagunas y de risibles fullerías. Así, efectivamente, se genera y crea en mi cerebro un monstruo llamado película fallida y fraudulenta, que parece jugar en todo momento con una moneda con dos caras...
Maldito Bastardo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow