Callejón sin salida (Cul-de-sac) transcurre todo su metraje en el castillo de Lindisfarne, en Holy Island. George (Donald Pleasence) compra ese castillo para vivir, asombrado por su extensa historia, su aislamiento del exterior, por ser cuna de la cultura, Sir Walter Scott escribió dentro del castillo literatura Romántica como Rob Roy. Un plan perfecto para ir a vivir con su hermosa y joven esposa (Françoise Dorléac), y disfrutar del Amor.

En la mente de Polanski, no hay lugar para el Romanticismo. El Mal está presente ya sea en campos de concentración, en adoradores de Satán, en vampiros o en nuestras relaciones cotidianas. Cul-de-sac tiene todo el discurso de Polanski, emparentada sobre todo con El baile de los vampiros por su condición de comedia negra, de carácter extraño y personajes alucinados; también tiene mucho en común con la trilogía claustrofóbica del encierro o del apartamento (Repulsión, La semilla del diablo y El quimérico inquilino), pudiendo formar Cul-de-Sac la tetralogía por su manejo de los espacios cerrados y el ascenso de la locura en un ambiente cotidiano y rutinario. Otro tema común en Polanski son las relaciones entre hombres y mujeres basadas en el poder (dominación incluso) y en el deseo, presente en Cul-de-sac como en Tess, Lunas de Hiel y La Venus de las pieles.

Tras estas pinceladas sobre el carácter de Cul-de-sac, lo mejor es verla y que cada uno desentrañe por sí solo todos los temas subterráneos que esconde el film de Polanski.