Las amargas lágrimas de Petra von Kant nos habla sobre la imposibilidad de entendimiento en las relaciones personales. Para explicar esta teoría Fassbinder realiza un guión de hierro con momentos cumbre como cuando explica la diferencia entre comprender y compadecer, pero el guión de forma general es aún mejor por estar impregnado de filosofía kantiana.
Es decir, Petra von Kant empieza muy segura de sí misma, orgullosa por la experiencia que ha tenido en la vida y el éxito conseguido, aún así se enamora perdidamente y sufre porque no siente correspondencia en ese amor. Aquí interviene Immanuel Kant, Petra no puede conocer realmente a su amor (Hanna Schygulla), se hace una idea sobre ella. Con el paso del tiempo esa percepción cambia, Petra se dá cuenta que no puede exigir a la otra persona, que tiene que sentir el amor con independencia de lo que la otra sienta. No todo el mundo entiende el amor de la misma forma y Fassbinder lo que critica es que las relaciones personales y amorosas se basen en el poder que ejerce una persona sobre la otra, un ganador y un perdedor.
Es un film muy teatral dividido en cinco escenas de larga duración pero a su vez también tiene muchas cualidades cinematográficas, los planos siempre captan lo clave de la puesta en escena, el cuadro del felino salvaje, los gatos domesticados al principio del film, etc. También tiene importancia el color de la fotografía. Fassbinder simboliza estados de ánimo con los diferentes colores, cuida los vestidos, los peinados para mostrar las distintos estados de ánimo de sus personajes.
Excelente film que estoy convencido que le gustaría a un maestro de la psicología femenina como Ingmar Bergman, siempre gustoso de hacer films introspectivos intentando mostrar todo lo posible sobre el alma humana.