La sinopsis de la película es magistral, cuatro trabajadores europeos desarrapados que necesitan dinero aceptan trasladar dos camiones de nitroglicerina a través del paisaje latinoamericano hasta una planta de explotación petrolífera (que pudieron representar de forma más salvaje y agreste sin buenas carreteras, entre cañaverales y suelo agreste), que en realidad es el sur de Francia.

Se nota que es una obra maestra de los 50, donde el estudio psicológico de los personajes, la situación de denuncia social y laboral o la verosimilitud de las peripecias son más importantes que la tensión dramática de jugarse la vida, solo hay que comparar esta película con el "Diablo sobre ruedas" de Steven Spielberg, ni con cualquier obra de Hitchcock pero la película no prioriza eso.

Esta es una obra que causara admiración o indiferencia inmediata sobre todo a los que estén acostumbrados a este tipo de cine de los años 50, que de alguna manera aunque no tenga nada que ver me recuerda a "El río" (1951) de Jean Renoir en donde lo fundamental no son solo las peripecias externas que parecerán poco remarcadas, sino el efecto psicológico que producen en los personajes. En eso son únicos.

En los últimos 40 años los aficionados al cine estamos tan acostumbrados a los saltos de pánicos, sensaciones fuertes y la música neowagneriana que a los amantes de este tipo de cine esta película quizá le sabrá a poco y se decepcione bastante.

Esta película es otra cosa desde los primeros 40 minutos donde nos sabe reflejar con anécdotas a los trabajadores europeos que están en paro en un país indeterminado de Latinoamericano, en la miseria, encerrados, vagueando en los bares, dispuestos a todo por conseguir dinero y largarse.

Brillante la interpretación de Yves Montand y de su nuevo amigo el personaje sesentón de Charles Vanel que empieza siendo un retador violento, todas las trampas que hace para que lo elijan para la misión "suicida" y su posterior debilitamiento y acobardamiento cuando está en medio de la aventura.

También hay caracteres secundarios peculiares dignos de reseñar, que es una pena que se trabajaran poco, como el capataz delos camioneros cínico pero con valores, o Véra Clouzot que representa a la antigua mujer latinoamericana fiel hasta el final pero con rabietas y contradicciones, y que psicológicamente se interpreta a si misma.

Yves Montand que empieza siendo un hombre contenido y hasta nostálgico, se nota que cuando está en medio de la misión lo único que le importa es acabarla, no la seguridad de su amigo, se va volviendo cada vez más impulsivo y un pelín más odioso (otros opinaran que se pone en su lugar ante las dudas y "cobardías" de su compañero).

Aunque hay obstáculos sobre todo narra el proceso psicológico de los cuatro personajes principales y su modo de enfrentarse a ellos y superarlos.

Película necesaria para cualquier cinéfilo de verdad y recomendable teniendo en cuenta que es cine plenamente de la década 50, no esperes grandes aventuras exteriores ni tensión al máximo.

Contiene spoiler, o sea, que si no la has visto no lo leas.