Un rápido retroceso:

American Beauty me parece la peor película ganadora del Oscar de los 90s, y es que a pesar de su brillante guión y un buen conjunto de actuaciones, Mendes hace una dirección bastante nula, no le da forma al filme y le queda muy grande el trabajo, la hace ver muy telefilme.

Camino a la perdición me parece la mejor película de Mendes en cu corta carrera, una dirección convincente y dándole a la cinta muy buen ritmo y es nuevamente ayudado por unas actuaciones muy bien hechas.

Titanic es mi película favorita, y por supuesto la pareja de Leo Di Caprio y Kate Winslet me conquisto, esperaba con ansias que volvieran a trabajar juntos.

Y entonces llega Revolutionary Road, película que narra la relación de Frank y Alice, un matrimonio a punto de fracasar, y donde los sueños de los protagonistas han sido frustrados.

La película técnicamente esta muy bien hecha, la ambientación supera con gran claridad a todas las demás del año, es demasiada perfecta, tanto sus escenarios como su vestuario. La música y fotografia estan muy bien, lo mismo que un muy buen trabajo de edición.

Atención: el mejor duelo interpretativo desde el que protagonizaron Sean Penn y Tim Robbins en Mystic River, tanto Leo y Kate realizan probablemente las mejores interpretaciones de sus respectivas carreras, con un simple gesto comunican cualquier cosa, hay que verles la cara cada vez que muestran sentimientos de ira o rencor, estan soberbios, es difícil declarar un ganador, pero al final que el personaje de Leo sea mas complicado lo hace vencedor. Y claro que no hay que olvidarnos de Michael Shannon, en los pocos minutos que aparece lo hace tremendamente bien, sin dejarse opacar por los protagonistas, incluso los llega a superar en sus escenas.

Y Mendes, bueno, creo que es el principal responsable de que esta película no haya logrado acabar de emocionarme, su dirección nuevamente se queda corta antes tal material, aunque le llega al espectador rápidamente, de igual manera lo suelta, y asi sucede muchas veces, hace que se vea muy irregular, y no llegue a su nivel máximo.

El final es desgarrador y exacto, infravalorada, pero tampoco es la obra maestra que se esperaba, y donde ante todo las actuaciones son lo mejor.