Una buena obra que muestra que el idioma no solo se limita a las palabras si no también a gestos y actitudes.
Unas actuaciones excelentes se suman a una impresionante fotografía.
La combinación de historias consiguen conmover a los más duros del barrio. Pero a un nivel de sacar una lágrima a Eastwood, Seagal y el reparto completo de "Los mercenarios".
La nota no llega a más por los siguiente motivos.
Recuerda mucho a la gran obra "amores perros". Tanto que parece la misma obra pero ampliada a algo más que México.
Luego algunos momentos son muy forzados para intentar sacar la lagrima pero es aún peor lo alargado de algunas secuencias. Me recuerda a la desastrosa obra de la pequeña Coppola "Lost in traslation". Como ejemplo la fiesta mexicana o la discoteca nipona.
En conjunto una obra que merece ser vista sin pretensiones de ningún tipo.